Pobre Jacinto!

Este es el nombre del marido de una cotorra que tuve la desgracia de padecer durante dos horas el pasado domingo en la playa. Era una metralleta humana.
Y pobres de sus hijo: -Pablo, mucha agua llevas hoy.. luego te dolerá la garganta-. Este comentario fué hecho a las dos del mediodía a 30 º y 22º la temperatura del agua. Si el chaval coge anginas en esas circustacias sería un caso digno de estudio.
Por supuesto, cuando una leve ráfaga de viento se llevó la sombrilla y le dió, como es costumbre a un gordito que estaba en medio de la siesta, también culpó a Jacinto, que ni puso la sombrilla, ni se beneficiaba de su sombra. Y no sólo eso, le mandó a pedir disculpas.
Pobre Jacinto! Jacintos del mundo: mis más sinceras condolencias.